Amor sin escamas: el lagarto cariñoso que ha conquistado los corazones en Bolivia

En un mundo donde solemos asociar las emociones más tiernas con gatos, perros o aves, un joven del departamento del Beni, en Bolivia, ha roto el molde: su lagarto, un reptil que muchos imaginarían frío e impasible, ha enternecido a miles en redes sociales por su sorprendente comportamiento... ¡recibe caricias como si fuera un perrito más!
El video viral, que ha circulado ampliamente en plataformas como TikTok y Facebook, muestra al lagarto relajado sobre el pecho de su dueño, disfrutando sin resistencia de las caricias en su cabeza y cuello. Lejos de huir o mostrar incomodidad, cierra los ojos y se entrega completamente al momento. Un gesto que ha generado admiración, ternura y muchas preguntas.
¿Cómo es posible esto?
Aunque parezca sacado de una película animada, lo cierto es que muchos reptiles —como los lagartos tegu, iguanas o geckos— pueden establecer vínculos con los humanos si se los cría desde pequeños con constancia, paciencia y respeto. De hecho, expertos en herpetología (el estudio de reptiles y anfibios) afirman que algunos lagartos son capaces de reconocer a su cuidador habitual y responder positivamente a la interacción.
Este caso desde el corazón del Beni no solo ha puesto una sonrisa en el rostro de miles, sino que también nos invita a mirar con otros ojos a los animales menos “convencionales”. El joven protagonista, cuyo nombre no ha trascendido en medios, explicó en redes que su lagarto ha convivido con él desde pequeño y que siempre ha sido dócil.
@elbeniano10 como son los michis en el Beni💚🤠 #benibolivia #viralbolivia #fyp #paratiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii #vivaelbenicarajooo💚 #trinidadbenibolivia #siganme ♬ sonido original - Elbeniano1🫡
El amor, en todas sus formas
Desde Eres Radio, donde celebramos todos los días la emoción, el amor y la conexión a través de la mejor música romántica en español, no podíamos dejar de compartir esta historia que nos recuerda algo muy importante: el amor no entiende de formas, tamaños ni especies. Ya sea con una canción que nos mueve el alma o con un lagarto que disfruta de una caricia, los momentos de ternura están en todas partes... solo hay que saber mirar.